EJEMPLARES, PLAZA FATIMA

Andrés Anza

 

El 16 de marzo la colección Magenta, una de las más importantes colecciones de arte grafico del noreste del país, inauguró una exhibición llamada Ejemplares, ahí se pueden apreciar litografías, grabados, xilografías y otras técnicas que utilizaron artistas como Mimmo Paladino, Joan Miró, David Alfaro Siqueiros, Leopoldo Méndez, Fernando de Szyszlo, Wilfrido Lam, Eduardo Mata, Francisco Toledo, Antoni Tápies, Francisco Zúñiga, José Luis Cuevas, Rufino Tamayo, Juan Manuel de la Rosa, Pablo Picasso, Georges Braque, entre otros artistas.

Sin embargo parecería que estas muestras de artistas tan reconocidos mundialmente estarían exhibidas en un lugar que alcance este tipo honor. La Plaza Fátima es un espacio dependiente de la Secretaría de Cultura del Ayuntamiento de San Pedro Garza García; antes de llegar, de entrada uno sabe que estará frente a Picassos, Toledos, Siqueiros, como quien dice una garantía de que la colección es muy buena, y lo es, pero tiene una deficiencia esta muestra, el espacio. En el recorrido de estas sesenta obras graficas, uno se encuentra con paredes muy mal pintadas, manchadas, el piso sucio con pedazos de cinta (probablemente marcas para ubicar la exposición pasada) el techo con muchos clavos y ganchos que no cumplen ninguna función en la colección, pero que si llaman la atención del espectador, los cuadros sin colgar, entre otros cuantos detalles más que desvían la atención del espectador que debe ir a ver obras que aunque hablan por sí solas, están siendo denigradas, por usar una palabra fuerte. Las obras deben estar en un contexto neutro en el que se les pueda apreciar sin estarse preocupando por las marcas de suciedad alrededor del cuadro. Sin embargo entre tantas obras que tienen el poder de llamar la atención se puede reconocer a muchos buenos. Uno de ellos es Joan Miró, el español que dedico su obra y vida a crear una nueva tendencia, o más bien matar la convencional, una serie de litografías presentadas en este lugar hacen alusión a su estilo surrealista basado en lo infantil, son unas figuras negras como garabatos  que en sus espacios de adentro son coloreadas, la técnica y cuidado del buen empleo crean una sensación muy armónica a pesar de estar viendo prácticamente figuras hechas por un bebe. También se puede agradecer la oportunidad de apreciar la obra más figurativa del mexicano Leopoldo Méndez y el costarricense Francisco Zúñiga que su buen dibujo más fácil de comprender o identificar al menos, nos acerca a lo que este arte grafico tiene que decir.